Hay que aceptar que la comunidad que ha sustentado a la selección mexicana, más allá de sus fronteras durante décadas, está siendo perseguida, amedrentada y detenida...
Nada que alardear si ganas y un rotundo fracaso si pierdes * Si utilizamos a la Copa Oro como brújula, seguiremos volando directo hacia un Mundial...
De nada sirven si los clubes no recuerdan cuáles son los personajes que no se tientan el corazón para mentir y dejar los proyectos a medias...