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SUCESIÓN PRESIDENCIAL

El estilo personal de gobernar y el nuevo ‘dedazo presidencial’

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Un modelo PRI-Mor recargado, actualizado y remasterizado * Según palabras de Cossío Villegas, podríamos estar frente al regreso del “dedazo” y el “tapadismo” que operó el partido tricolor de manera muy exitosa durante décadas, pero ahora muy fortalecido al estilo AMLO

 

MARCO ANTONIO FLORES***

 

En la Mañanera del 8 de junio de 2023, el Presidente Andrés Manuel López Obrador anunció que su partido Morena daría a conocer las reglas que acatarían las “corcholatas” para competir por la candidatura oficial y adelantó algunas “condiciones” que habrán de cumplirse para garantizar la unidad del partido y el consecuente triunfo en los comicios presidenciales.

Dijo que de acuerdo con el resultado de las “encuestas”, los premios de consolación o compensación para las corcholatas serán: para el ganador la candidatura presidencial: para el segundo lugar el liderazgo de la Cámara de Senadores; para el tercer lugar el liderazgo de la Cámara de Diputados y para el cuarto lugar una posición en el gabinete.

Reiteró AMLO que atrás quedo el “dedazo presidencial” y el “tapadismo” e insistió en que ahora el proceso será abierto, democrático y transparente, sin embargo, todas las acciones del Presidente son signos inequívocos de que estamos frente a una nueva versión de las antiguas prácticas políticas priístas, en donde el Presidente en turno definía el juego, los jugadores, los tiempos y las reglas de la sucesión presidencial.

En 2018 todos fuimos testigos del triunfo apabullante de Andrés Manuel López Obrador, quien después de 18 años y gracias a su perseverancia y habilidad política llegó a la Presidencia. Muchos observadores señalan que el liderazgo de López Obrador tiene capital político para quedarse en el poder, al menos el mismo tiempo que le llevó llegar a la Presidencia de la República, dieciocho años -tres sexenios-.

En el cuarto año de gobierno sigue teniendo la más alta popularidad que haya tenido algún Presidente, a pesar de que no se perciben los logros esperados, principalmente en materia económica, en seguridad, en salud y educación.

A juzgar por sus acciones de gobierno, AMLO solo piensa en el futuro electoral. Sus programas sociales y su diaria infaltable Mañanera le han dado resultado, lo que le ha permitido un permanente discurso de campaña que le garantizan alta popularidad. Mantener el poder gracias al “clientelismo electoral.

Al alcanzar la conquista de 23 gubernaturas solo durante el gobierno de la 4T y luego de las elecciones del 4 de junio de 2023 con las que Morena se apoderó de “la joya de la corona”, el Estado de México, las elecciones presidenciales de 2024 se perfilan como el punto culminante del proyecto de permanencia en el poder más amplio solo comparable con el poder que detentó el PRI durante 65 años, desde 1929 y hasta 1994.

Estamos a un año de la elección presidencial de 2024. Todos recuerdan que el Presidente Andrés Manuel comenzó a hablar de su sucesión inmediatamente después de las elecciones intermedias de 2021.

Muchos analistas señalan que dados los escasos resultados de su gobierno, sobre todo en materia de seguridad y salud, el hablar de la sucesión presidencial ha sido una estrategia de distracción de los grandes problemas nacionales.

Para la mayoría de los mexicanos se trata de practicar un deporte favorito, el “futurismo”, todos quieren adivinar quién podría ser el siguiente Presidente(a) de México. Desde los tiempos del partido único y durante al menos 10 sexenios se hizo presente esta práctica en diferentes momentos.

Se le atribuye a Adolfo Ruiz Cortines haber patentado el “tapadismo”, ya que “su” candidato, Adolfo López Mateos, el más joven del gabinete y por quien nadie apostaba, pues ocupaba el lugar 7 u 8, resultó una verdadera sorpresa. Después hubo destapes memorables: Díaz Ordaz confesó su arrepentimiento de escoger a Luis Echeverría.

En la sucesión del presidente Luis Echeverría, cuando todos daban por hecho que el secretario de Gobernación, Mario Moya Palencia, sería el ungido, el candidato resultó ser el secretario de Hacienda, José López Portillo, último de los presidentes revolucionarios, como él mismo se autodefinió.

Para 1982, año en que se inaugura el “neoliberalismo”, muchos apostaban por un “político” como Javier García Paniagua, pero el candidato fue un “tecnócrata”, Miguel de la Madrid.

En 1988 en la carrera final estaba Manuel Bartlett, el “político”, pero nuevamente el candidato resultó ser el “tecnócrata” Carlos Salinas de Gortari. Se recuerda el “berrinche” de Alfredo del Mazo y el destape en “falso” de Sergio García Ramírez.

En 1994 se dio otro memorable “berrinche” cuando Manuel Camacho se enteró que el candidato a la Presidencia era Luis Donaldo Colosio. Su asesinato siendo candidato cimbró el sistema político mexicano. La fortuita llegada de Ernesto Zedillo y su falta de interés por la prensa y la política -así lo confesó-, aunado a la “sana distancia” con el partido y con su antecesor, acabaron con la era PRI-gobierno.

En 2000 llegó el triunfo del Vicente Fox, quien prácticamente se apoderó o se “agandalló” la candidatura panista. En 2005 Felipe Calderón le aplicó la misma a su jefe, el presidente Fox, se fue por la libre y se destapó en célebre mitin que le organizó el entonces gobernador de Jalisco.

Los malos resultados de los gobiernos panistas dieron paso al regreso del PRI con un candidato carismático, Enrique Peña Nieto, quien al final de su gestión -con su popularidad hecha añicos- se le consideró el “peor” presidente en toda la historia reciente.

Con esos antecedentes y dado el contexto político que estamos viviendo con un Presidente muy poderoso a quien todos sus colaboradores y gobernadores contestan sin vacilaciones, ante la pregunta “qué hora es”, “la que usted diga Señor Presidente”.

Estamos frente a un modelo PRI-Mor recargado, actualizado y remasterizado. Dado el “estilo personal de gobernar” del Presidente AMLO -en palabras de Cossío Villegas-, podríamos estar frente al regreso del “dedazo” y el “tapadismo” que operó el PRI de manera muy exitosa durante décadas.

Para algunos, razón de estabilidad política y de paz social. Para otros, motivo de una “presidencia” hereditaria o la “dictadura perfecta”, como la definió Vargas Llosa.

Como ya lo comentamos, se caracterizaba porque el antecesor fabricaba a su sucesor sin que éste hiciere nada. No podemos saber si está muerto el tapadismo o si sólo habrá de cambiar de color. Surge la pregunta: ¿Querrá el Presidente impulsar a su candidato o candidata para llegar a la Presidencia?

Desde el arranque de este gobierno se empezaron a hacer encuestas y pronósticos. Desde hace casi dos años AMLO hizo sus “destapes” y dejó en claro quiénes podrían sucederlo: Marcelo Ebrard, secretario de Relaciones Exteriores; Ricardo Monreal, líder de Morena en el Senado; Adán Augusto López Hernández, secretario de Gobernación y exgobernador de Tabasco, así como Claudia Sheinbaum, jefa de Gobierno de la Ciudad de México, señalada como la “favorita” del presidente.

El escenario de las “corcholatas” -llamadas así por AMLO, porque se destapan-, aunado a las reglas que él dicta, implica un control casi absoluto de la sucesión por parte del Presidente de la República y parece que garantizaría el triunfo electoral.

Habrá que ver si la “oposición” sigue navegando en “modo avión” y si le alcanza el “clientelismo electoral” versus los logros de su gestión.

Ahora el Presidente anuncia con anticipación los reintegros o premios de consolación para los jugadores perdedores, habrá que hacer memoria del partidazo. En tiempos del presidente Luis Echeverría, esos premios se daban hasta después del destape del candidato. Una vez que se pronunciaban los sectores del partido -el equivalente ahora serán las encuestas- sucedía que el candidato menos esperado, José López Portillo (exsecretario de Hacienda), era el candidato presidencial; uno de sus fuertes competidores, Muñoz Ledo (exsecretario del Trabajo) se haría cargo de la jefatura del PRI y la campaña; otro que era el “favorito” y habría jalado a toda la cargada, Mario Moya Palencia (exsecretario de Gobernación), sería sacrificado y se tendría que ir de embajador, y otros competidores como Augusto Gómez Villanueva, que se habrían disciplinado, se integrarían al gabinete.

Con el presidente José López Portillo sucedió algo parecido, el inesperado Miguel de la Madrid (exsecretario de Programación y Presupuesto) fue el agraciado; el favorito Javier García Paniagua se integró al gabinete, aunque solo por un tiempo.

Con el presidente Miguel de la Madrid, después del destape de Carlos Salinas de Gortari (exsecretario de Programación y Presupuesto), el gran perdedor Manuel Barttlet (exsecretario de Gobernación) sería el coordinador de la campaña presidencial y a la postre secretario de Educación Pública y gobernador de Puebla.

Otros presidenciables como Sergio García Ramírez, Alfredo del Mazo y Ramón Aguirre tuvieron cargos de consolación. El presidente Carlos Salinas de Gortari sorprendió cuando los sectores del partido se “pronunciaron” en favor de Luis Donaldo Colosio (exsecretario de Desarrollo Social) y dejó en el camino al “favorito” Manuel Camacho Solís y otros como el mismísimo Fernando Gutiérrez Barrios, quien ya había sido renunciado un año antes del destape, en virtud de que ya tenía toda la cargada en su favor.

Después del asesinato del candidato Colosio todo el sistema PRI-gobierno se descompuso. El presidente Ernesto Zedillo no supo manejar su sucesión a la antigua usanza priísta y tuvo que presumir que entregó el poder debido a su vocación de demócrata.

Ahora en la tercera alternancia con Morena en el poder, con un presidencialismo exacerbado, con un poder ilimitado y con muestras de autoritarismo y desprecio por la división de Poderes, todo parece indicar que estamos frente a una sucesión presidencial que se dará con los métodos de hace 60 años. Además, un presidente que ha hecho añicos a la oposición y a los partidos que la integran. Un PAN a la baja en votación, un PRI que si bien mantiene su voto duro, no tiene una mayor perspectiva, un PRD reducido a cero, casi a punto de perder el registro y un MC ensoberbecido por sus dos gubernaturas, Jalisco y Nuevo León, pero que en votación nacional no ha rebasado el 8%.

Con Estado de México y Coahuila se demostró que la “Alianza”, con su suma de números históricos, no garantiza nada. Para las elecciones presidenciales de 2024, AMLO parece tener el camino libre. La posible salvación con un candidato ciudadano es como un espejismo por dos motivos: primero, no hay ninguna personalidad, surgida de la sociedad civil que dé color y que haya demostrado tener los tamaños para enfrentarse a AMLO y, segundo, si la hubiere no le darán los tiempos para darse a conocer.

La sociedad hasta el momento no quiere en la Presidencia al PAN ni al PRI y si no cumple, tampoco debería querer a Morena, pero dada la labor de AMLO, la mayoría de los mexicanos le darán otra oportunidad a la “Transformación”.

Dos exigencias indispensables que reclama la sociedad mexicana entera, para cualquiera que pretenda ser Presidente de México, sea candidato “ciudadano” o de partido. Primero: una incuestionable y probada honestidad; segundo, que por su capacidad, preparación, logros en favor de la sociedad, autoridad moral y valores, sean ejemplo de las nuevas generaciones y factor de “unidad nacional”.

Estaremos pendientes…

 

***Acádemico y consultor.

SUCESIÓN PRESIDENCIAL

Feliz fin de AMLO: Xóchitl Gálvez

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La precandidata del FAM a la Presidencia de la República lanza mensaje con drones * “Chequen lo que pasó hoy en CDMX. El cielo nunca miente. Si miran con atención, en todos lados”, expresó Gálvez en su cuenta de X

 

ERIC GARCÍA

 

Xóchitl Gálvez, precandidata presidencial de la alianza Fuerza y Corazón por México, subió a su cuenta de X (antes Twitter) imágenes de un espectáculo de drones que fueron desplegados en el cielo de la Ciudad de México con mensajes alusivos a su precampaña electoral.

En su publicación, Gálvez mencionó que este evento marcó el inicio de lo que considera será el fin del Presidente Andrés Manuel López Obrador en las próximas elecciones.

Utilizando el hashtag #HabráSeñaleX, instó a la población a estar atenta al cielo, ya que los drones serían visibles desde distintas zonas, incluyendo Santa Fe, Coyoacán y Azcapotzalco, entre otros lugares.

“Chequen lo que pasó hoy en CDMX. El cielo nunca miente. Si miran con atención, en todos lados”, expresó Gálvez en su cuenta de X.

La coreografía de drones formó mensajes como “Feliz fin de AMLO”, “2024” y “No + inocentes”.

El evento concluyó con la formación de una X dentro de un corazón rojo, distintivo de la precandidata presidencial del PAN, seguido del nombre “Xóchitl”.

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SUCESIÓN PRESIDENCIAL

Inadmisible que abrazos para el delincuente y balazos para la gente: Xóchitl Gálvez

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Con Sheinbaum se disparó la inseguridad, expresa la aspirante presidencial opositora * ¿De qué sirve que suba el salario mínimo?, si los precios están hasta arriba, expresa la política hidalguense

 

ERIC GARCÍA

 

La estrategia de seguridad se va a cambiar porque es inadmisible que los abrazos sean para los delincuentes y los balazos para los ciudadanos, advirtió la precandidata presidencial del PAN, PRI y PRD, Xóchitl Gálvez Ruiz.

En su mensaje, la senadora con licencia afirmó que es absurdo que la exjefa de Gobierno Claudia Sheinbaum presuma como un logro los niveles de seguridad, cuando el 60 por ciento de los capitalinos se sienten inseguros

“Vamos a replantear la estrategia de seguridad. Pronto la vamos a anunciar, porque estamos reunidos, no es cualquier cosa, estamos reunidos con especialistas, gente de ciencia, gente que conoce, que ha tenido buenos resultados, para presentar lo que será una nueva estrategia.

“Pero de entrada les digo, no va a haber abrazos para los delincuentes, a los delincuentes les vamos a aplicar la ley, porque los abrazos han sido para los delincuentes y los balazos han sido para los ciudadanos”, sentenció.

Xóchitl Gálvez se dijo “aterrada” con la situación que están pasando los jóvenes mexicanos.

“Están matando a los jóvenes, tenemos que parar. Miren, se quejaban del pasado, pero ellos salieron peor, es una cosa para que tengan un dato: en los primeros cinco años en el sexenio de (Felipe) Calderón, que ya era un escándalo, hubo 95 mil personas asesinadas; en el de (Enrique) Peña, 12 mil; y ahorita van 169 mil. Vamos de mal en peor, y desaparecidos van 46 mil y quisieron borrar los desaparecidos, eliminar las cifras. Por eso la estrategia de seguridad se cambia”.

 

INFLACIÓN POR LAS NUBES

La aspirante presidencial opositora también lamentó el problema de la crisis del campo y la carestía que están sufriendo algunos productos a consecuencia del abandono de las autoridades al sector agrícola.

“Hay un problema grave. ¿A cómo está el jitomate?, a ver, a ver, a 60 pesos lo compré ayer. ¡60 pesos el jitomate!, y luego que mi bacalao lleva un chingo de jitomate, ¡no manchen!, o sea, ahora sí que va a quedar medio aguadito, pero a 60 pesos, yo estaba impresionada con el kilo de jitomate, porque no hay agua en el campo, porque no hay apoyo a los productores, por eso ¿de qué sirve que suba el salario mínimo?, si los precios están hasta arriba. Entonces tenemos que controlar la inflación, que bajen los precios, que se mantenga la inflación en orden, pero tenemos que apoyar a nuestros campesinos”, recalcó.

 

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SUCESIÓN PRESIDENCIAL

Marcelo Ebrard, el gran perdedor

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De nada sirvió ser leal al Presidente de la República * La candidatura presidencial ya le tocaba, pues AMLO se la debe * El excanciller sabía lo que pasaría * Es egresado del  Colmex, sabe de política exterior y tiene la experiencia * El objetivo se logró, dejó contento a su jefe, pero no le alcanzó

 

MARCO ANTONIO FLORES***

 

Marcelo Ebrard Casaubón realiza sus últimos esfuerzos por remontar a Claudia Sheinbaum en su lucha por ganar la Coordinación Nacional de los Comités de Defensa de la Cuarta Transformación.

Las últimas encuestas publicadas esta semana, el lunes 28 de agosto de 2023, por los principales diarios nacionales dan como segura ganadora a la consentida del Presidente Andrés Manuel López Obrador: Claudia Sheinbaum Pardo.

Reforma apunta una ventaja de la exjefa de Gobierno sobre Ebrard de 15%; en tanto El Economista -Mitofsky- señala esa ventaja en 8.9%.

Es de resaltar que el lunes 4 de septiembre de 2023 será el último día de levantamiento de las encuestas de Morena, por lo que se antoja prácticamente imposible remontar tales diferencias.

El 6 de septiembre, cuando se anuncie oficialmente el resultado, Marcelo Ebrard se convertirá en el gran perdedor de la carrera presidencial a la que el Presidente López Obrador dio el banderazo de salida desde junio de 2021.

El triunfo de Claudia Sheinbaum era esperado y anunciado por analistas, periodistas y politólogos desde los primeros meses en que AMLO abrió su sucesión, debido a las muestras de preferencias y signos inequívocos que siempre mostró el Primer Mandatario en favor de su “candidata”.

Marcelo Ebrard, el hermano, el “Carnal Marcelo”, como siempre fue segundo en la predilección del Ejecutivo federal, después de Claudia Sheinbaum, la “hermana consentida”.

Parece que no le valió que como secretario de Relaciones Exteriores cumplió todos los caprichos del Presidente Andrés Manuel: “Intentar” un liderazgo para la “integración” latinoamericana y declarar oposición al “bloqueo a Cuba”.

México se opuso desde 1962 al bloqueo, pero nunca, ningún Presidente había invitado al Comandante Castro a un acto estrictamente bilateral, y menos en un día tan significativo como la celebración de nuestra Independencia, como lo hizo AMLO dándole tribuna a Díaz Cannel, toda vez que unas semanas antes había reprimido la más grande manifestación del pueblo cubano en toda la historia de la “revolución cubana”.

Todo ello en detrimento de la prestigiada diplomacia mexicana. El excanciller Ebrard sabía lo que pasaría. Es egresado del Colmex, sabe de política exterior y tiene la experiencia, pero no le importó. El objetivo se logró, dejó contento a su jefe, pero no le alcanzó.

En este espacio de la tradicional revista política IMPACTO, hemos presentado el perfil de 15 “presidenciables” y fue Marcelo Ebrard Casaubón el primer perfil que publicamos en septiembre de 2021.

Hemos presentado a todos los presidenciables de Morena, del FAM y de MC, incluidos Adán Augusto López Hernández, Claudia Sheinbaum, Ricardo Monreal, Gerardo Fernández Noroña, Manuel Velasco, Xóchitl Gálvez, Beatriz Paredes, Santiago Creel, Enrique de la Madrid y Samuel García, entre otros.

Ahora presentamos la versión “actualizada y remasterizada” del excanciller, quien siempre tuvo chance -por su gran trabajo- de convertirse en candidato a la Presidencia de la República del bloque oficialista de Morena, PVEM y PT, con reales posibilidades de ganar la elección presidencial de 2024.

Lo hacemos en el esquema acostumbrado de “Lo bueno, lo malo y lo feo”, con el fin de que nuestros lectores e interesados en la “Sucesión Presidencial” tengan a la mano la información básica acerca del perfil de quienes aspiran o se encontraban con posibilidades de ocupar el máximo cargo político en México para el periodo 2024-2030.

 

TRAYECTORIA

Marcelo Ebrard Casaubón se perfilaba como el candidato a la Presidencia de México para el periodo 2024-2030, con más experiencia y habilidad política, preparación académica y gran cercanía al Presidente.

Se recuerda que en dos ocasiones declinó candidaturas en favor de AMLO. En 2000, siendo secretario general del Partido Centro Democrático y candidato del mismo a jefe de Gobierno capitalino, declinó su candidatura en favor de  Andrés Manuel López Obrador del PRD.

En noviembre de 2011, cuando se definiría la candidatura del PRD a la Presidencia de la República y las apuestas favorecían a Marcelo Ebrard, sorpresivamente se hizo a un lado y cedió la candidatura a Andrés Manuel.

Ebrard tiene la más amplia experiencia política de todos los aspirantes. Inició su carrera política en el PRI, como secretario general del PRI en el DF, de 1988 a 1992.

En el sexenio de Carlos Salinas, acompañó a su “mentor”, Manuel Camacho, como secretario general del entonces Gobierno del Distrito Federal de 1992 a 1993 y como subsecretario de Relaciones Exteriores de 1993 a 1994.

Luego del rompimiento de Manuel Camacho con Carlos Salinas y del asesinato de Luis Donaldo Colosio, Camacho y Ebrard quedaron marginados del PRI-gobierno en el sexenio de Ernesto Zedillo.

En 1997, en las elecciones intermedias, Marcelo logró ser diputado federal por el Partido Verde Ecologista de México (PVEM). Desde ahí, junto con Camacho, crearon el Partido Centro Democrático y, en 2000, fue candidato por ese partido a jefe de Gobierno capitalino, hasta que declinó en favor de López Obrador.

En 2002, el jefe de Gobierno del DF, López Obrador, lo nombró secretario de Seguridad Pública del DF, cargo que desempeñó hasta el 6 de diciembre de 2004 y después fue designado secretario de Desarrollo Social del DF, cargo al que renunció en 2005 para ser candidato a jefe de Gobierno del DF por el PRD, candidatura ganada por encima de Pablo Gómez, Jesús Ortega y Demetrio Sodi, siendo electo el 2 de julio de 2006.

El 15 de noviembre de 2011 se anunció que el método para seleccionar un candidato a la Presidencia en 2012 sería una serie de “encuestas” que nunca se hicieron públicas, pero terminaron dándole el triunfo a López Obrador.

 

LO BUENO

Como canciller logró sortear de buena manera las relaciones con nuestro socio y vecino del norte, siempre cumpliendo con el papel de “bombero emergente”, apagando los fuegos que AMLO encendía contra Estados Unidos, como cuando cuestionó la existencia de la Estatua de la Libertad, o cuando apoyó de manera abierta a Trump en su segunda campaña por la presidencia.

Fue el factor de conciliación en las divergencias comerciales con el T-MEC y toda la política migratoria con EU. Siempre planteó políticas de avanzada en materia de seguridad, armas, drogas, educación, salud, inversión extranjera y el nearshoring.

Como jefe de Gobierno de la CDMX en 2010, fue nominado como el “mejor alcalde del mundo”, en una encuesta realizada por la fundación londinense City Mayors.

También fue presidente de la Red Global de Ciudades (Global Network of Safer Cities) de la ONU, del 3 de septiembre de 2012 al 3 de febrero de 2014.

Promovió y apoyo políticas en favor del aborto, reconocimiento de diversidad sexual, madres solteras, discapacitados y personas de la tercera edad.

Continuó los programas de Andrés Manuel y los amplió. La pensión alimenticia para adultos mayores la elevó a rango de ley local.

Entre sus acciones de mayor polémica ante la opinión pública se encuentra la expropiación de predios y edificios que funcionaban como centros operativos de la delincuencia. Se recuerdan los casos Tepito (por narcomenudeo) e Iztapalapa (por venta de refacciones robadas). Esto, aunado a la introducción de cámaras de videovigilancia, junto con acciones en favor del desarrollo social, coadyuvó a reducir el índice delictivo en la Ciudad de México.

En seguridad se recuerda la invitación a Rudolph Giulliani, exalcalde de Nueva York. Durante su mandato fue reconocido por sus decisiones en el combate al cambio climático, la construcción de una infraestructura de movilidad, mediante la transformación del transporte público con el sistema Ecobici; la ampliación del 350% del Sistema Metrobús y la construcción de la Línea 12 del Metro.

 

LO MALO

A pesar de su experiencia y capacidad, como canciller tuvo que satisfacer las ocurrencias de su jefe. Se cuentan: el asilo al presidente de Bolivia, Evo Morales; el sometimiento a los dictados de Donald Trump en materia de nuestra política exterior, incluida la contención de los migrantes; el largo silencio y omisión para no felicitar al mandatario Joe Biden; los bandazos en permitir a AMLO hacer declaraciones de apoyo a los gobiernos de Venezuela, Bolivia, Cuba  y Nicaragua; la solicitud de perdón a los reyes de España por los agravios de la conquista; permitir el ridículo de nuestro Presidente en intervenciones en diferentes foros como el de la ONU, cuando comparó a Benito Juárez con Benito Mussolini; el cambio de nombre en el recibimiento a la vicepresidenta de Estados Unidos, Kamala Harris; tolerar y avalar dudosos nombramientos de embajadores sin perfil, ni diplomático ni político para esas delicadas misiones.

Como ejemplos, premio de consolación al mediocre Esteban Moctezuma; el escándalo con Panamá tratando de nombrar a un acosador; los exgobernadores priístas como premio a su apoyo “electoral”; Blanca Jiménez, quien tuvo pésimo desempeño en Conagua, a Francia;  la esposa de su amigo, Lilia Rossbach de Pérez-Gay, nombrada embajadora en Argentina; Josefa González Blanco, nombrada embajadora de México en el Reino Unido, quien renunció como secretaria del Medio Ambiente por haber demorado un vuelo comercial, etc, etc.

 

LO FEO

Los principales escándalos de Marcelo fueron por causas ajenas a su desempeño personal. Para muestra unos botones: el caso de Tláhuac, cuando como secretario de Seguridad Pública no llegó a tiempo y no pudo evitar el linchamiento de tres policías en la delegación Tláhuac.

Otro caso, lejos de su alcance, lo fue la tragedia del New’s Divine. El 20 de junio de 2008, un pésimo operativo policiaco ocasionó el fallecimiento de 9 jóvenes y 3 policías.

Por ese motivo tuvieron que renunciar Joel Ortega Cuevas, secretario de Seguridad Pública, y Rodolfo Félix Cárdenas, procurador general de Justicia. A este último lo sustituyó su subprocurador Miguel Ángel Mancera, hasta ese momento un desconocido abogado sin experiencia política.

En 2012, cuando Marcelo quiso dejar como sucesor a Mario Delgado, se le complicó por el escándalo de la Línea 12 del Metro y entró como bateador emergente Mancera con el visto bueno de AMLO.

El escándalo mayor en que Ebrard se vio envuelto fue la tragedia en la Línea 12 del Sistema de Transporte Colectivo (STC), con 26 muertos como saldo.

Resulta que el lunes 3 de mayo de 2021, el tren se cayó entre las estaciones Tezonco y Olivos, en la alcaldía Tláhuac. Esta tragedia, en la que nunca quedó claro si la responsabilidad fue de Ebrard por fallas de origen en la construcción, o bien la responsabilidad fue de Claudia Sheinbaum -en virtud de que ocurrió 9 años después- por ser consecuencia de la falta de mantenimiento.

Ebrad ha acusado que entre las corcholatas, los “dados estaban cargados”, que las movilizaciones de toda la maquinaria de Morena, incluidos gobernadores, Secretaría del Bienestar, siervos de la nación, operaron en favor de Sheinbaum, lo que confirmaría que el proceso de selección de Morena significó un “dedazo inducido”.

Ahora habría que esperar que Claudia Sheinbaum pueda vencer a Xóchitl Gálvez y le alcance con el apoyo de 23 gobernadores, todo el aparato de Morena, la cooperación de grupos de naturaleza dudosa -“cárteles”- y el abierto apoyo del Ejecutivo federal para convencer a un electorado conformado en gran parte por las clases medias, jóvenes aspiracionistas y decepcionados de la 4T, que habrían preferido mil veces a Marcelo.

 

***Académico y consultor.

 

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