De Unidos y Sí por México a autopostularse como candidato ciudadano a la Presidencia * Ha mostrado ser un férreo opositor a las políticas públicas del Presidente Andrés Manuel López Obrador y las ha criticado por ser contrarias a la inversión privada y la democracia
MARCO ANTONIO FLORES***
“Los mexicanos estamos hasta la madre de los políticos, sexenio tras sexenio han demostrado su incompetencia”, afirmó Gustavo de Hoyos el pasado 13 de marzo al destaparse para contender por la Presidencia el próximo año, y subrayó -a través de un video-: “¿Qué pasaría si uno de nosotros se levanta para tomar las riendas de este país? Alguien que sienta lo mismo que nosotros, tengo la misma sangre que tú, alguien que no está podrido de poder”.
De esta manera, el empresario regiomontano dio el salto. De ser uno de los promotores de las organizaciones “Unidos” y “Sí por México”, que fueron de las principales organizadoras de las apotéoticas y exitosas marchas ciudadanas del 13 de noviembre de 2022 y la del 26 de febrero de 2023 en contra de la reforma electoral de AMLO, a autopostularse como candidato “ciudadano” a la Presidencia de la República para 2024.
El estilo de Gustavo de Hoyos nos trae el recuerdo de Manuel Clouthier, quien después de ser empresario y dirigente de la Coparmex incursionó en la política como aguerrido opositor arropado por el PAN. Como candidato a la gubernatura de Sinaloa, acusó de fraude a Francisco Labastida (candidato del PRI) y a Manuel Bartlett (secretario de Gobernación). Después como candidato presidencial, también acusó de fraude a Carlos Salinas y a Bartlett, él en alianza con Cuauhtémoc Cárdenas y Rosario Ibarra de Piedra.
En esta su revista política IMPACTO, hemos analizado el perfil de quince presidenciables, desde hace más de un año clasificándolos en: 1.- Candidatos de partido o de la Alianza, que incluye a los del PAN, PRI, PRD y MC; 2.- Candidatos oficiales, los de Morena, en donde se dará el tradicional “dedazo presidencial”, y 3.- Candidatos ciudadanos. Dentro de estos últimos, hemos presentado los perfiles de Lorenzo Córdova, Fernando Landeros y Carlos Slim Helú, sin que alguno de ellos haya manifestado su intención de contender por la Presidencia de la República.
Por ello, ahora resulta de interés conocer los antecedentes y perfil de Gustavo de Hoyos, quien alza la mano y se presenta como candidato ciudadano.
TRAYECTORIA
Gustavo De Hoyos Walther tendrá 58 años al llevarse a cabo las elecciones presidenciales de 2024. Es licenciado en Derecho por la Universidad Autónoma de Baja California y en Administración de Empresas por Cetys-Universidad, campus Mexicali, donde obtuvo la Maestría en Derecho Corporativo e Internacional.
Su trayectoria es puramente empresarial, fungió como director general de la empresa de servicios legales De Hoyos y Avilés (DHA), con operación multirregional en México. Fundó y preside los consejos de Alternativas por México y el Consejo Nacional de Litigio Estratégico, A. C.
Fue presidente de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) de 2016 a 2020. Como su principal experiencia política, en 2021 fundó del movimiento “Sí por México” que impulsó la construcción de la coalición Va por México, conformada por el PRI, PAN y PRD.
Consejero en el Instituto Nacional del Emprendedor (Inadem), en el Instituto del Fondo Nacional de la Vivienda de los Trabajadores, en Nacional Financiera, S. N. C., y en el Banco Nacional de Comercio Exterior.
LO BUENO
Lo bueno de Gustavo de Hoyos es que tuvo la iniciativa y ha dado la pauta para que los ciudadanos distinguidos que aspiran a la Presidencia, ya levanten la mano y lo hagan público.
Ha mostrado ser un férreo opositor a las políticas públicas del Presidente Andrés Manuel López Obrador y las ha criticado por ser contrarias a la inversión privada y la democracia.
En junio de 2020, todavía como presidente de la Coparmex, en videoconferencia con empresarios de Iberoamérica y el rey Felipe VI de España, señaló que el Ejecutivo federal defraudó la confianza empresarial por sus decisiones “irracionales”.
En noviembre pasado calificó como una “aberración” a la reforma electoral propuesta por AMLO, por atentar contra la democracia. Con su marcado estilo norteño lleno de franqueza y transparencia, sostiene que los opositores al gobierno actual se encuentran en una crisis de credibilidad, por lo que sin la participación de la sociedad civil no pueden aspirar a ganar la Presidencia de la República en 2024.
La anunciada candidatura ciudadana de Gustavo de Hoyos, enriquece el juego de alternativas para el electorado, aunque su ideario político, su falta de experiencia política y su abierta imagen transparente y honesta pareciera rayar en la candidez política.
LO MALO
Gustavo de Hoyos parece estar metido en el dilema: candidato de partido o candidato ciudadano. Si bien es de sobra conocido hartazgo con los partidos políticos, resulta aventurado y riesgoso sugerir desaparecer el régimen de partidos en nuestro sistema político-electoral o, al menos optar por un candidato ciudadano para la Presidencia, como si esa fórmula garantizara un mejor futuro para el país.
En México los casos más célebres de Jorge Castañeda y el “Bronco” fracasaron. Hay que recordar que esa opción no es nueva y no ha tenido éxito en las últimas décadas en todo el mundo.
Uno de los primeros experimentos fue el que vivió Perú en los 90s con Alberto Fujimori, quien se presentó como una opción ciudadana ajena a los partidos existentes. Fujimori comienza su carrera política en 1990, cuando se presenta como candidato a la Presidencia en las elecciones generales de ese año al frente del movimiento Cambio 90, que había creado el año anterior.
Fujimori era entonces desconocido en las esferas políticas. De la noche a la mañana se convirtió en el líder de siete agrupaciones políticas distintas y en 1990 fue elegido democráticamente presidente de Perú. Después de tres reelecciones, propició la toma ilegal de instituciones públicas, pasando a ser un mandatario autoritario y los últimos años fue llevado a prisión, por aclamación popular, igual que cuando fue llevado al poder.
La lección es clara para quien pretenda ser candidato ciudadano. Solo será viable su candidatura si es avalada por una alianza de partidos políticos con la sociedad civil.
La concentración del 26 de febrero fue una muestra del potencial que puede desarrollar la oposición para ganar esa contienda al candidato(a) oficial del Presidente López Obrador y su partido. Sin embargo, solo se podrá vencer al oficialismo, mediante la “Alianza” partidista en bloque con la sociedad civil y decenas de organizaciones, que han impulsado las grandes manifestaciones ciudadanas. La interrogante es: ¿cómo podrá surgir un líder que concilie los intereses partidistas con los de la ciudadanía y la sociedad civil..?
LO FEO
Si bien el anuncio de Gustavo de Hoyos de competir por la Presidencia de la República fue bien recibido, causó asombro y llamaron la atención sus propuestas de “políticas públicas”, ampliamente criticadas cuando expuso, en materia de seguridad, ideas demasiado drásticas e inviables, como revisar la pena de muerte y poner como ejemplo de castigo contra los delincuentes las extremas medidas punitivas que está aplicando en El Salvador el mandatario Nayib Bukele, que han sido criticadas por organismos internacionales como violatorias de derechos humanos.
Por ahora se tienen encuestas y estimaciones de los apoyos y preferencias que tienen los personajes que lideran. Entre los candidatos oficiales Claudia Sheinbaum; entre los candidatos de partido: PAN, Lilly Téllez; PRI, Beatriz Paredes, y PRD, Miguel Ángel Mancera, no así los candidatos ciudadanos, ya que Gustavo De Hoyos es el primero que se pone en la pasarela de presidenciables ciudadanos y el grado de conocimiento que amplios sectores populares del país tendrían de él, podría estimarse mínimo.
La falta de definición de la Alianza Va por México respecto al procedimiento y las fechas de “eliminatorias” internas y entre partidos, para lograr una candidatura única y de consenso, pone en riesgo la falta de tiempo para que el candidato(a) opositor pueda ser conocido, validado y legitimado por 96 millones de electores de todo el país.
Las corcholatas llevan nueve meses en campaña. ¿Qué esperan..?, el Edomex no deberá ser la pauta, ni aún en el mejor escenario para la “Alianza”, y si no fuera el caso, peor aún.
La precandidata del FAM a la Presidencia de la República lanza mensaje con drones * “Chequen lo que pasó hoy en CDMX. El cielo nunca miente. Si miran con atención, en todos lados”, expresó Gálvez en su cuenta de X
ERIC GARCÍA
Xóchitl Gálvez, precandidata presidencial de la alianza Fuerza y Corazón por México, subió a su cuenta de X (antes Twitter) imágenes de un espectáculo de drones que fueron desplegados en el cielo de la Ciudad de México con mensajes alusivos a su precampaña electoral.
Chequen lo que pasó hoy en CDMX. El cielo nunca miente.
En su publicación, Gálvez mencionó que este evento marcó el inicio de lo que considera será el fin del Presidente Andrés Manuel López Obrador en las próximas elecciones.
Utilizando el hashtag #HabráSeñaleX, instó a la población a estar atenta al cielo, ya que los drones serían visibles desde distintas zonas, incluyendo Santa Fe, Coyoacán y Azcapotzalco, entre otros lugares.
“Chequen lo que pasó hoy en CDMX. El cielo nunca miente. Si miran con atención, en todos lados”, expresó Gálvez en su cuenta de X.
La coreografía de drones formó mensajes como “Feliz fin de AMLO”, “2024” y “No + inocentes”.
El evento concluyó con la formación de una X dentro de un corazón rojo, distintivo de la precandidata presidencial del PAN, seguido del nombre “Xóchitl”.
Con Sheinbaum se disparó la inseguridad, expresa la aspirante presidencial opositora * ¿De qué sirve que suba el salario mínimo?, si los precios están hasta arriba, expresa la política hidalguense
ERIC GARCÍA
La estrategia de seguridad se va a cambiar porque es inadmisible que los abrazos sean para los delincuentes y los balazos para los ciudadanos, advirtió la precandidata presidencial del PAN, PRI y PRD, Xóchitl Gálvez Ruiz.
En su mensaje, la senadora con licencia afirmó que es absurdo que la exjefa de Gobierno Claudia Sheinbaum presuma como un logro los niveles de seguridad, cuando el 60 por ciento de los capitalinos se sienten inseguros
“Vamos a replantear la estrategia de seguridad. Pronto la vamos a anunciar, porque estamos reunidos, no es cualquier cosa, estamos reunidos con especialistas, gente de ciencia, gente que conoce, que ha tenido buenos resultados, para presentar lo que será una nueva estrategia.
“Pero de entrada les digo, no va a haber abrazos para los delincuentes, a los delincuentes les vamos a aplicar la ley, porque los abrazos han sido para los delincuentes y los balazos han sido para los ciudadanos”, sentenció.
Xóchitl Gálvez se dijo “aterrada” con la situación que están pasando los jóvenes mexicanos.
“Están matando a los jóvenes, tenemos que parar. Miren, se quejaban del pasado, pero ellos salieron peor, es una cosa para que tengan un dato: en los primeros cinco años en el sexenio de (Felipe) Calderón, que ya era un escándalo, hubo 95 mil personas asesinadas; en el de (Enrique) Peña, 12 mil; y ahorita van 169 mil. Vamos de mal en peor, y desaparecidos van 46 mil y quisieron borrar los desaparecidos, eliminar las cifras. Por eso la estrategia de seguridad se cambia”.
INFLACIÓN POR LAS NUBES
La aspirante presidencial opositora también lamentó el problema de la crisis del campo y la carestía que están sufriendo algunos productos a consecuencia del abandono de las autoridades al sector agrícola.
“Hay un problema grave. ¿A cómo está el jitomate?, a ver, a ver, a 60 pesos lo compré ayer. ¡60 pesos el jitomate!, y luego que mi bacalao lleva un chingo de jitomate, ¡no manchen!, o sea, ahora sí que va a quedar medio aguadito, pero a 60 pesos, yo estaba impresionada con el kilo de jitomate, porque no hay agua en el campo, porque no hay apoyo a los productores, por eso ¿de qué sirve que suba el salario mínimo?, si los precios están hasta arriba. Entonces tenemos que controlar la inflación, que bajen los precios, que se mantenga la inflación en orden, pero tenemos que apoyar a nuestros campesinos”, recalcó.
De nada sirvió ser leal al Presidente de la República * La candidatura presidencial ya le tocaba, pues AMLO se la debe * El excanciller sabía lo que pasaría * Es egresado del Colmex, sabe de política exterior y tiene la experiencia * El objetivo se logró, dejó contento a su jefe, pero no le alcanzó
MARCO ANTONIO FLORES***
Marcelo Ebrard Casaubón realiza sus últimos esfuerzos por remontar a Claudia Sheinbaum en su lucha por ganar la Coordinación Nacional de los Comités de Defensa de la Cuarta Transformación.
Las últimas encuestas publicadas esta semana, el lunes 28 de agosto de 2023, por los principales diarios nacionales dan como segura ganadora a la consentida del Presidente Andrés Manuel López Obrador: Claudia Sheinbaum Pardo.
Reforma apunta una ventaja de la exjefa de Gobierno sobre Ebrard de 15%; en tanto El Economista -Mitofsky- señala esa ventaja en 8.9%.
Es de resaltar que el lunes 4 de septiembre de 2023 será el último día de levantamiento de las encuestas de Morena, por lo que se antoja prácticamente imposible remontar tales diferencias.
El 6 de septiembre, cuando se anuncie oficialmente el resultado, Marcelo Ebrard se convertirá en el gran perdedor de la carrera presidencial a la que el Presidente López Obrador dio el banderazo de salida desde junio de 2021.
El triunfo de Claudia Sheinbaum era esperado y anunciado por analistas, periodistas y politólogos desde los primeros meses en que AMLO abrió su sucesión, debido a las muestras de preferencias y signos inequívocos que siempre mostró el Primer Mandatario en favor de su “candidata”.
Marcelo Ebrard, el hermano, el “Carnal Marcelo”, como siempre fue segundo en la predilección del Ejecutivo federal, después de Claudia Sheinbaum, la “hermana consentida”.
Parece que no le valió que como secretario de Relaciones Exteriores cumplió todos los caprichos del Presidente Andrés Manuel: “Intentar” un liderazgo para la “integración” latinoamericana y declarar oposición al “bloqueo a Cuba”.
México se opuso desde 1962 al bloqueo, pero nunca, ningún Presidente había invitado al Comandante Castro a un acto estrictamente bilateral, y menos en un día tan significativo como la celebración de nuestra Independencia, como lo hizo AMLO dándole tribuna a Díaz Cannel, toda vez que unas semanas antes había reprimido la más grande manifestación del pueblo cubano en toda la historia de la “revolución cubana”.
Todo ello en detrimento de la prestigiada diplomacia mexicana. El excanciller Ebrard sabía lo que pasaría. Es egresado del Colmex, sabe de política exterior y tiene la experiencia, pero no le importó. El objetivo se logró, dejó contento a su jefe, pero no le alcanzó.
En este espacio de la tradicional revista política IMPACTO, hemos presentado el perfil de 15 “presidenciables” y fue Marcelo Ebrard Casaubón el primer perfil que publicamos en septiembre de 2021.
Hemos presentado a todos los presidenciables de Morena, del FAM y de MC, incluidos Adán Augusto López Hernández, Claudia Sheinbaum, Ricardo Monreal, Gerardo Fernández Noroña, Manuel Velasco, Xóchitl Gálvez, Beatriz Paredes, Santiago Creel, Enrique de la Madrid y Samuel García, entre otros.
Ahora presentamos la versión “actualizada y remasterizada” del excanciller, quien siempre tuvo chance -por su gran trabajo- de convertirse en candidato a la Presidencia de la República del bloque oficialista de Morena, PVEM y PT, con reales posibilidades de ganar la elección presidencial de 2024.
Lo hacemos en el esquema acostumbrado de “Lo bueno, lo malo y lo feo”, con el fin de que nuestros lectores e interesados en la “Sucesión Presidencial” tengan a la mano la información básica acerca del perfil de quienes aspiran o se encontraban con posibilidades de ocupar el máximo cargo político en México para el periodo 2024-2030.
TRAYECTORIA
Marcelo Ebrard Casaubón se perfilaba como el candidato a la Presidencia de México para el periodo 2024-2030, con más experiencia y habilidad política, preparación académica y gran cercanía al Presidente.
Se recuerda que en dos ocasiones declinó candidaturas en favor de AMLO. En 2000, siendo secretario general del Partido Centro Democrático y candidato del mismo a jefe de Gobierno capitalino, declinó su candidatura en favor de Andrés Manuel López Obrador del PRD.
En noviembre de 2011, cuando se definiría la candidatura del PRD a la Presidencia de la República y las apuestas favorecían a Marcelo Ebrard, sorpresivamente se hizo a un lado y cedió la candidatura a Andrés Manuel.
Ebrard tiene la más amplia experiencia política de todos los aspirantes. Inició su carrera política en el PRI, como secretario general del PRI en el DF, de 1988 a 1992.
En el sexenio de Carlos Salinas, acompañó a su “mentor”, Manuel Camacho, como secretario general del entonces Gobierno del Distrito Federal de 1992 a 1993 y como subsecretario de Relaciones Exteriores de 1993 a 1994.
Luego del rompimiento de Manuel Camacho con Carlos Salinas y del asesinato de Luis Donaldo Colosio, Camacho y Ebrard quedaron marginados del PRI-gobierno en el sexenio de Ernesto Zedillo.
En 1997, en las elecciones intermedias, Marcelo logró ser diputado federal por el Partido Verde Ecologista de México (PVEM). Desde ahí, junto con Camacho, crearon el Partido Centro Democrático y, en 2000, fue candidato por ese partido a jefe de Gobierno capitalino, hasta que declinó en favor de López Obrador.
En 2002, el jefe de Gobierno del DF, López Obrador, lo nombró secretario de Seguridad Pública del DF, cargo que desempeñó hasta el 6 de diciembre de 2004 y después fue designado secretario de Desarrollo Social del DF, cargo al que renunció en 2005 para ser candidato a jefe de Gobierno del DF por el PRD, candidatura ganada por encima de Pablo Gómez, Jesús Ortega y Demetrio Sodi, siendo electo el 2 de julio de 2006.
El 15 de noviembre de 2011 se anunció que el método para seleccionar un candidato a la Presidencia en 2012 sería una serie de “encuestas” que nunca se hicieron públicas, pero terminaron dándole el triunfo a López Obrador.
LO BUENO
Como canciller logró sortear de buena manera las relaciones con nuestro socio y vecino del norte, siempre cumpliendo con el papel de “bombero emergente”, apagando los fuegos que AMLO encendía contra Estados Unidos, como cuando cuestionó la existencia de la Estatua de la Libertad, o cuando apoyó de manera abierta a Trump en su segunda campaña por la presidencia.
Fue el factor de conciliación en las divergencias comerciales con el T-MEC y toda la política migratoria con EU. Siempre planteó políticas de avanzada en materia de seguridad, armas, drogas, educación, salud, inversión extranjera y el nearshoring.
Como jefe de Gobierno de la CDMX en 2010, fue nominado como el “mejor alcalde del mundo”, en una encuesta realizada por la fundación londinense City Mayors.
También fue presidente de la Red Global de Ciudades (Global Network of Safer Cities) de la ONU, del 3 de septiembre de 2012 al 3 de febrero de 2014.
Promovió y apoyo políticas en favor del aborto, reconocimiento de diversidad sexual, madres solteras, discapacitados y personas de la tercera edad.
Continuó los programas de Andrés Manuel y los amplió. La pensión alimenticia para adultos mayores la elevó a rango de ley local.
Entre sus acciones de mayor polémica ante la opinión pública se encuentra la expropiación de predios y edificios que funcionaban como centros operativos de la delincuencia. Se recuerdan los casos Tepito (por narcomenudeo) e Iztapalapa (por venta de refacciones robadas). Esto, aunado a la introducción de cámaras de videovigilancia, junto con acciones en favor del desarrollo social, coadyuvó a reducir el índice delictivo en la Ciudad de México.
En seguridad se recuerda la invitación a Rudolph Giulliani, exalcalde de Nueva York. Durante su mandato fue reconocido por sus decisiones en el combate al cambio climático, la construcción de una infraestructura de movilidad, mediante la transformación del transporte público con el sistema Ecobici; la ampliación del 350% del Sistema Metrobús y la construcción de la Línea 12 del Metro.
LO MALO
A pesar de su experiencia y capacidad, como canciller tuvo que satisfacer las ocurrencias de su jefe. Se cuentan: el asilo al presidente de Bolivia, Evo Morales; el sometimiento a los dictados de Donald Trump en materia de nuestra política exterior, incluida la contención de los migrantes; el largo silencio y omisión para no felicitar al mandatario Joe Biden; los bandazos en permitir a AMLO hacer declaraciones de apoyo a los gobiernos de Venezuela, Bolivia, Cuba y Nicaragua; la solicitud de perdón a los reyes de España por los agravios de la conquista; permitir el ridículo de nuestro Presidente en intervenciones en diferentes foros como el de la ONU, cuando comparó a Benito Juárez con Benito Mussolini; el cambio de nombre en el recibimiento a la vicepresidenta de Estados Unidos, Kamala Harris; tolerar y avalar dudosos nombramientos de embajadores sin perfil, ni diplomático ni político para esas delicadas misiones.
Como ejemplos, premio de consolación al mediocre Esteban Moctezuma; el escándalo con Panamá tratando de nombrar a un acosador; los exgobernadores priístas como premio a su apoyo “electoral”; Blanca Jiménez, quien tuvo pésimo desempeño en Conagua, a Francia; la esposa de su amigo, Lilia Rossbach de Pérez-Gay, nombrada embajadora en Argentina; Josefa González Blanco, nombrada embajadora de México en el Reino Unido, quien renunció como secretaria del Medio Ambiente por haber demorado un vuelo comercial, etc, etc.
LO FEO
Los principales escándalos de Marcelo fueron por causas ajenas a su desempeño personal. Para muestra unos botones: el caso de Tláhuac, cuando como secretario de Seguridad Pública no llegó a tiempo y no pudo evitar el linchamiento de tres policías en la delegación Tláhuac.
Otro caso, lejos de su alcance, lo fue la tragedia del New’s Divine. El 20 de junio de 2008, un pésimo operativo policiaco ocasionó el fallecimiento de 9 jóvenes y 3 policías.
Por ese motivo tuvieron que renunciar Joel Ortega Cuevas, secretario de Seguridad Pública, y Rodolfo Félix Cárdenas, procurador general de Justicia. A este último lo sustituyó su subprocurador Miguel Ángel Mancera, hasta ese momento un desconocido abogado sin experiencia política.
En 2012, cuando Marcelo quiso dejar como sucesor a Mario Delgado, se le complicó por el escándalo de la Línea 12 del Metro y entró como bateador emergente Mancera con el visto bueno de AMLO.
El escándalo mayor en que Ebrard se vio envuelto fue la tragedia en la Línea 12 del Sistema de Transporte Colectivo (STC), con 26 muertos como saldo.
Resulta que el lunes 3 de mayo de 2021, el tren se cayó entre las estaciones Tezonco y Olivos, en la alcaldía Tláhuac. Esta tragedia, en la que nunca quedó claro si la responsabilidad fue de Ebrard por fallas de origen en la construcción, o bien la responsabilidad fue de Claudia Sheinbaum -en virtud de que ocurrió 9 años después- por ser consecuencia de la falta de mantenimiento.
Ebrad ha acusado que entre las corcholatas, los “dados estaban cargados”, que las movilizaciones de toda la maquinaria de Morena, incluidos gobernadores, Secretaría del Bienestar, siervos de la nación, operaron en favor de Sheinbaum, lo que confirmaría que el proceso de selección de Morena significó un “dedazo inducido”.
Ahora habría que esperar que Claudia Sheinbaum pueda vencer a Xóchitl Gálvez y le alcance con el apoyo de 23 gobernadores, todo el aparato de Morena, la cooperación de grupos de naturaleza dudosa -“cárteles”- y el abierto apoyo del Ejecutivo federal para convencer a un electorado conformado en gran parte por las clases medias, jóvenes aspiracionistas y decepcionados de la 4T, que habrían preferido mil veces a Marcelo.